Sesión familiar: Un recuerdo para varias generaciones

Fotografía Alvaro Sancha

 

Encontrar una excusa para organizar una sesión familiar de fotos no es necesario. Para una familia existen varios momentos con una gran carga de significado como las navidades o las celebraciones de cumpleaños que son propicios y clave para inmortalizar y crear recuerdos. Sin embargo la familia es algo tan extraordinario que cualquier momento es bueno para abordar una sesión fotográfica. Porque no hay ser más querido que un familiar. Por eso, no hace falta encontrar un motivo. Porque la reunión de todos para la sesión ya es una excusa por sí misma. 

Puede ser más íntima, es decir, pareja con hijos. Y a partir de ahí es posible ir abriendo el espectro e incluir a más miembros de la familia. Es decir, más multitudinaria y que abarque a la totalidad de la familia. Abuelos, tíos, primos… Hasta dónde vosotros queráis llegar. 

Pero decidáis lo que decidáis, lo importante es que tengáis presente que cualquier momento en familia bien se merece una sesión fotográfica. De hecho, muchas personas piensan que si han contratado un fotógrafo para sus bodas o el nacimiento de sus hijos, también deberían contratar a uno para una sesión familiar. 

Fotografía Yeray Cruz

 Sesión familiar: dónde, cuándo y cómo 

Muchas personas que quieren contratar una sesión familiar me suelen preguntar por sitios para hacerla. Mi recomendación siempre es la de buscar un lugar diferente y original. Puede ser uno cargado de significado para vosotros. O no. Porque después de la sesión ese lugar ya habrá adquirido un significado especial para toda vuestra familia de por vida. Será el lugar donde os reunisteis aquella vez para la sesión. Además, como cada familia es única, el resultado la sesión familiar será único. 

Por eso podemos encontrar un espacio diferente para vosotros. No solo hago reportajes familiares en Valladolid. También podemos montar la sesión en cualquier lugar de España o del mundo cuando coincida con algún taller que tenga fuera o evento y siempre y cuando las restricciones lo permitan. Por ejemplo, para mí es habitual hacer sesiones familiares o de cualquier otro tipo en Asturias, Cantabria y el norte en general. Ahora que llega el invierno, por ejemplo, una idea sería aprovechar el aspecto que lucen los prados verdes del Principado estos días. Aunque en realidad cualquier momento del año es perfecto para hacer la sesión. 

Otro aspecto a tener en cuenta es que la familia es algo que cambia según avanza el tiempo. Hay nuevos nacimientos, los niños crecen rápido, etc. Así que el hecho de que las familias estén en constante evolución implica que cada momento sea único e 

irrepetible. Pero el recuerdo de ese momento perdurará siempre gracias a la fotografía. 

Además, en estos tiempos de incertidumbre, de distanciamiento social y otras restricciones, muchas personas se ha dado cuenta del lugar que ocupa la familia en sus vidas. Mucha gente, durante los meses de confinamiento, ha echado de menos a sus familiares. Por eso, hoy más que nunca una sesión de fotos en familia adquiere un mayor valor. 

Otra cuestión es la ropa. Muchas personas no saben qué tipo de ropa utilizar en una sesión familiar. Me preguntan si tienen que ir vestidos todos con los mismos colores o con ropa del mismo estilo. La ropa importa en la sesión. Es importante que no acapare la mayor parte de la atención en el resultado final del reportaje. Recordad que lo importante aquí, sois vosotros. Por eso mi consejo es que, sin renunciar a vuestro estilo, escojáis 

Fotografía Alvaro Sancha

Cada familia es única 

No hay una familia igual a otra. Por eso, uno de mis objetivos durante la sesión, será reflejar esa originalidad, eso que os hace únicos, en el resultado final del trabajo. Porque como familia, os merecéis enseñaros al mundo tal y como sois. Sin posados y con espontaneidad. Además, durante la producción del reportaje en familia, llegará un momento en el que os olvidaréis de la cámara y empezaréis a disfrutar del momento todos juntos. 

Porque los lazos afectivos que se crean entre cada miembro de la familia suelen ser muy poderosos. Es decir, hay sentimientos de mucho arraigo. Y por experiencia, sé que eso influye mucho a la hora de generar un ambiente agradable durante la sesión familiar. De este modo surgirán miradas de complicidad, sonrisas y gestos de afinidad. Porque a todos se nos dibuja una sonrisa en el rostro cuando pensamos en nuestra familia. Así que será inevitable que se cree este ambiente tan especial durante la sesión. De captar la magia y plasmarlo en imágenes, ya me encargo yo. 

También piensa que, aunque la familia evolucione, las fotografías de la sesión familiar tendrán el mismo valor siempre: incalculable. Porque los más pequeños de la sesión, las conservarán, y algún día se las enseñarán a sus hijos. Y estos a los suyos. Muchas veces recordamos a nuestros abuelos gracias a las fotografías que se han conservado. O conocemos a nuestros bisabuelos también gracias a ellas. 

Por eso es imposible encontrar algo con mayor valor humano que la fotografía. No existe. Por eso, hacer una sesión familiar será como extender la estirpe a lo largo del tiempo. Un recuerdo para varias generaciones. Por eso la mejor excusa para reuniros todos, es la sesión familiar en sí misma. 

Fotografía Yeray Cruz

Fotografía Nati Girons

Fotografía Alvaro Sancha

Fotografía Alvaro Sancha

Fotografía Isabel Alcaine

Fotografía Isabel Alcaine

Fotografía Alvaro Sancha

Fotografía Nati Girons

Fotografía Merce Marín By Y mi mundo Ellas

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